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Hace falta una carambola para que Alonso gane el título en la última carrera de Interlagos.


Llega la hora de la verdad en Interlagos. Fernando Alonso y Ferrari lucharán una vez más por el título en la última carrera. Desde 1997, el equipo italiano solo se ha quedado sin opciones en tres ocasiones antes de la cita final del campeonato. Pero nunca en estos años un piloto de Ferrari ha llegado con tanta desventaja —trece puntos- frente al primer clasificado.




A pesar de la lógica pasión con la que vamos a vivir este apasionante final, seamos realistas, porque como el propio Alonso explica, hace falta "una carambola" para ganar el título. ¿Y cuál podría ser esta?





El nivel actual de Red Bull y la diferencia de puntos a favor de Vettel complican sobremanera la posibilidad de ganar el campeonato. Sobre ello no hace falta incidir más. De aquí que durante estos días se analicen hasta la saciedad aquellos factores —"las carambolas"- que puedan ayudar a compensar la complicada situación de Alonso y Ferrari.






"Hoy, hemos visto la retirada de Webber", nos recordaba el piloto español tras el abandono del australiano en Austin, "a veces es el agua (refrigeración) a veces el Kers, a veces el alternador, pero siempre en el mismo coche, así que quizás algún día pueda ocurrir en el otro coche, y habrá que estar listos". Ya comentamos aquí en otra columna la menor fiabilidad de Red Bull en comparación a Ferrari esta temporada. Recordábamos que no ha habido cuatro carreras sin algún problema para sus dos coches. Incluso en los entrenamientos de Austin le tocó a Vettel, y en la carrera a Webber. En Red Bull tienen motivos para estar preocupados al respecto. Y sí, quién sabe si la fiabilidad sea un factor letal para el piloto alemán en la última carrera.








Al margen de la anterior, en Ferrari necesitarán también otros factores externos e inesperados: accidentes y coche de seguridad, errores en boxes o del piloto en pista etc…Pero el factor más comentado estos días es la presencia -y necesidad- de la lluvia. Se implora lluvia como si en tiempos de sequía se tratara. En estos momentos, no está garantizada la lluvia el sábado, pero sí el domingo.







La lluvia es ingrediente indispensable para crear una carrera revuelta porque Alonso necesita unas condiciones menos previsibles a las de seco. Pero tampoco olvidemos que puede ser un arma de doble filo incluso para quienes más las necesita. Porque el asfalto mojado, especialmente con fuerte lluvias, es traicionero para todos. Recordemos, por ejemplo, como Alonso perdió sus opciones bajo el diluvio de Japón 2007. También sufrió el un fenomenal accidente en la carrera brasileña de 2003, aunque entonces no se jugara nada.

Y quien piense que en asfalto mojado Alonso será superior a Vettel, tiene motivos para buscar otros alicientes. El alemán ganó su primera carrera cuando era un crío con Toro Rosso en Monza. Sí, el monoplaza era un "medio" Red Bull, pero Vettel no es manco en agua, y como el RB8 sea competitivo en esta superficie…





F2012


Por ello, el valor de la presencia de lluvia es que permita igualar —o superar- el rendimiento del F2012. Si nos remontamos a los momentos más competitivos de Ferrari esta temporada —Monza aparte-, la lluvia contribuyó a los mejores resultados de 2012. Malasia, Alemania (gracias a la pole), en Silverstone (quedó segundo, tras lograr también la primera posición)…

Desde Alemania no hubo más sesiones en agua. El F2012 ha sufrido muchas evoluciones durante esta temporada, y se ignora si el F2012 ha modificado el comportamiento del monoplaza italiano sobre mojado. Pero si fuera tan competitivo como en aquellas carreras, la victoria es posible. El tú a tú entre ambos solo se puede producir, salvo enorme sorpresa, en mojado.

Por eso es tan importante la lluvia. Y aún así, Vettel todavía cuenta con un colchón amplio —hasta el cuarto puesto- si el piloto español gana.








Hace falta "una carambola", cierto, pero si Fernando Alonso lograra su tercer título en Interlagos, viviremos tales emociones que el sabor del triunfo será único. Y ni la Fórmula 1 ni todos nosotros lo olvidaremos nunca.


EL CIRCUITO DE INTERLAGOS

A 800 metros sobre el nivel del mar

En sus 4,309 kilómetros de longitud los pilotos deben girar en sentido contrario a las agujas del reloj; sortear la complicada zona de curvas enlazadas; y los motores sufren por la altura a la que se encuentra el circuito, 800 metros sobre el nivel del mar. La velocidad máxima que se alcanza es de 314 kilómetros por hora.





FICHA


Vueltas: 71
Longitud: 4309 metros
Distancia total: 305.939 km.
Ganador 2010: Sebastian Vettel (RED BULL)
Ganador 2009: Mark Webber (RED BULL)
Pole 2010: Nico Hulkenberg
Pole 2009: Rubens Barrichello
Vuelta rápida 2010: 1:13.851 (Lewis Hamilton,MCLAREN)
Vuelta rápida 2009: 1:13.733 (Mark Webber,RED BULL)
Vuelta rápida: 1:11.473 (Juan Pablo Montoya,WILLIAMS, 2004)